El espectáculo duró una hora aproximada. En este tiempo los niños permanecieron muy atentos, tanto el mayor de diez años como el más pequeño de dos, que si bien trataba de participar, el pobre mío no llegaba a tiempo a las palmas o a la canción, pero puedo asegurar que se lo paso fenomenal.
A través de las Gitanas Azucena y Preciosilla conocemos a Giuseppe Verdi , las dos magas encargan al compositor que componga Óperas ambientadas en España. Verdi aparece y se van descubriendo los argumentos, los personajes, los lugares y la música de las Óperas de Verdi que transcurren en nuestro país. Todo esto con gran participación del público que canta (fragmentos conocidos ayudados con la proyección de las letras), baila (el Brindis de la Traviata), y hace juegos de percusión imitativa (coro del Rataplan de la Forza del destino).
Además de lograr la participación del público infantil y adulto, arrancaron las sonrisas de todos los asistentes.
Es una manera estupenda de que los pequeños (y los no tan pequeños) se adentren y conozcan el mundo de la Ópera, reservado, generalmente a un público minoritario.
Una manera de ir introduciendo a los niños en la música clásica y más concretamente en la Ópera es a través del sello de música clásica Deutsche Grammophon que tiene una colección de óperas para niños y que viene con un pequeño libro explicativo de la trama.
Nosotros las escuchamos en los viajes largos, primero leemos la parte de la historia que toca y luego la escuchamos, de este modo pasamos un buen rato.
Lo bueno de esta colección de música es, por un lado, la calidad artística de los interpretes y que se trata de obras conocidas ("Carmen", "La flauta mágica", "El barbero de Sevilla", "Las bodas de Fígaro", entre otras) y, por otro, el precio que es bastante razonable (unos 12 euros) y se puede encontrar tanto en tiendas de música como en grandes almacenes.
Os dejo con algunas de las carátulas de los cd's.
V
¡Bueno, pues todos a la Ópera!
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